Caracas, 3 de noviembre de 2019
La política es una obra de teatro continuado. Algunas series de televisión como House of Cards o Designated Survivor, juegan con la ficción para presentarnos escenarios que creemos que se encuentran lejos de la realidad. Esto nos hace apelar a la creatividad de los guionistas, sin darnos cuenta de que probablemente saquen inspiración simplemente contemplando su entorno. Pues, basta con leer las noticias para darnos cuenta de que estas producciones parecen seguir un guion de lo ocurrido. Es decir, una vez más, la realidad supera la ficción.
El último caso de escándalo en los Estados Unidos es fresco. Me refiero al de la diputada demócrata al Congreso, Katie Hill. Abiertamente bisexual, parece ser que mantuvo un ménage à trois -o trío, como se conoce en el mundo hispano- con su esposo y una empleada, Morgan Desjardins, de 24 años de edad. La denuncia, publicada por The Daily Mail, viene cargada con decenas de fotografías en donde presuntamente se ve a la servidora pública desnuda, fumando sustancias ilícitas, besándose con Desjardins, entre otras capturas de pantalla de sus conversaciones privadas que revelan los excesos de su vida; impropio de una persona de su estatus.
Un político es una persona pública que representa los valores de su sociedad. Su vida pasa a ser bien común y, para delegar por el colectivo, tiene que demostrar ser un baluarte de todo aquello que consideramos que nos representa. Hill, no solo viola la ley del Congreso que impide a los representantes tener relaciones con sus empleados, sino que cuestiona el propio movimiento “MeToo”, que ha tratado de denunciar y modificar una detestable práctica machista en la sociedad.
Si hemos mencionado teatro y política, no podemos dejar por fuera la palabra “Brexit”.
Compromete al movimiento ya que las acusaciones contra Hill se han suavizado por su condición de ser mujer. Muchos la han incluso respaldado. Mientras que, si se hubiese tratado de un hombre -y, más aún, de un republicano- su vida habría sido asediada por la tropa de la decencia. En cambio Hill, si bien tuvo que renunciar a su puesto, es de esos curiosos casos que no despiertan una indignación social colectiva. Demostrando que, si bien un movimiento puede velar por los más hermosos ideales, también comporta un sesgo discriminatorio que le resta credibilidad. Y que no se me malinterprete, considero el “MeToo” como un grito afortunado dentro de una sociedad perversa. Pero, al igual que cualquier movimiento que exija derechos, debería de velar por la verdadera igualdad.
Brexit
Si hemos mencionado teatro y política, no podemos dejar por fuera la palabra “Brexit”. Es natural pensar en las tres juntas, ya que el absurdo del caso nos ha llevado a cuestionar si realmente se llegará a materializar. Esta es la tercera prórroga que se le da en el 2019, ahora siendo el 31 de enero de 2020 y no el 31 de octubre la fecha de salida. Europa -y sus 27 miembros- han demostrado ser más que pacientes. Han querido negociar y se han presentado abiertos para llegar a la solución que menos perjudique a todos. Al contrario con los británicos, que votaron por el divorcio, pero no terminan de firmar los papeles.
Boris Johnson logró concretar unas elecciones electorales para el 12 de diciembre, una fecha tan antipática para salir a votar, que no se tenía una similar desde 1923. Su plan es lograr una mayoría absoluta para materializar su acuerdo de salida. El cual, por cierto, es mucho más perjudicial que el negociado -pero jamás aprobado- por Theresa May.
Por su parte, Jeremy Corbyn -líder de la oposición-, sigue apostando a revertir el daño antes de que sea demasiado tarde. Quiere otras elecciones para que Reino Unido recapacite y se mantenga dentro de la Unión. En fin, el panorama es complejo y, sobre todo, impredecible. La política de los británicos está más que nunca condicionada por la incertidumbre. Ahora, solo queda esperar por un golpe de suerte -o de sensatez- que encamine al país por la calle justa. Por mientras, los británicos pasarán un Halloween menos terrorífico del que se esperaban. Pero no así será con la navidad.
@NelsonTRangel
nelsontrangel@gmail.com